De acuerdo a un experimento que contó con 73 voluntarios y puesto en práctica por los investigadores de la Universidad de Oxford, el sexo tiene una influencia en la actividad cerebral de adultos en edad media y avanzada.
Los participantes realizaron varias tareas, para medir la actividad cerebral. El resultado de la evaluación mostró que los individuos que solían tener más relaciones son mentalmente más ágiles que los que solo se ocupaban de las relaciones sexuales una vez por semana y que los que jamás las tenían.
Según el estudio, realizado hace un par de años, en los adultos mayores una sexualidad activa puede propiciar una actividad más intensa en la zona del cerebro que alberga la memoria. Al mismo tiempo, los investigadores determinaron que la fluidez verbal se encuentra entre las funciones cognitivas que el sexo ayuda a optimizar.
Sin embargo, los científicos aún están intentando esclarecer cuál es la relación que existe entre la actividad sexual y la memoria. Se espera que futuros estudios ayuden a comprender mejor cómo la dinámica sexual del ser humano termina afectando la biología del cerebro.
PV
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