El puertorriqueño Carlos Correa, flamante adquisición de los Mellizos de Minnesota, ingresó en la lista de lesionados de 10 días después de seguir con las molestias en la mano derecha.

Tras recibir par de pelotazos en la serie contra los Orioles de Baltimore, el boricua salió airoso al no presentar un fractura.

Pese a pensar que evitaría la lista de inhabilitados, el estelar infielder, de 27 años, requiere más tiempo de lo esperado para volver a estar al 100 %.

Si bien registró un inicio lento de temporada, Correa se había encendido con el madero en los últimos ocho partidos. Sin embargo, su despertar ofensivo se vio frustrado la noche del jueves cuando recibió par de bolazos.

Aunque esperaba estar listo para la serie contra los Astros de Houston, organización a la que perteneció durante 7 años, reconoció que no era «un día realista» para su retorno.

«Pensé que iba a sanar más rápido, pero no estoy ahí todavía», le dijo Correa a Do-Hyoung Park de MLB.com, según recogió el portal de Las Mayores.

«Me sigue doliendo (la mano). Cuando trato de agarrar el bate, aún me duele. No voy a poder ayudar al equipo si salgo a jugar lesionado», subrayó.

Al inicio de la pretemporada, Carlos Correa firmó un contrato con Minnesota por 105.3 millones de dólares por las próximas tres temporadas.

En su presentación oficial, el campocorto aseguró que desea comandar una «dinastía» en Minnesota.

De acuerdo con las proyecciones de Baseball Reference, Correa sacará 23 pelotas del parque, impulsará a 81 compañeros y dejará un promedio de bateo de .269 en 2022.

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